Un hombre fue condenado días atrás por un juzgado de lo Penal de Palma a seis meses de prisión y al pago de una multa de 540 euros por falsificar la firma de su abogado en un recurso de casación.
Asimismo deberá indemnizar al perjudicado en 500 euros. El acusado, un hombre de 40 años y nacionalidad española, reconoció el delito ante la juez y se conformó con la pena impuesta, a la que se llegó tras un acuerdo de conformidad entre las partes.
Despido
El abogado perjudicado, defendido por el letrado Josep Perelló, fue el designado para presentar la demanda de despido improcedente del imputado, en julio de 2016. Diez meses después, en octubre de 2017, la demanda fue desestimada. Tras estudiar el abogado, junto a un graduado social, la resolución, decidieron no formular recurso por no considerarlo procedente, tal y como se refleja en el escrito de acusación pública.
A pesar de ello, el procesado presentó el 18 de diciembre de ese mismo año un recurso de casación por escrito ante el Juzgado de lo Social 4. Lo hizo no solo como si lo hubiese interpuesto su abogado sino que también falsificó su firma, sin que este lo supiera. En un principio la Fiscalía pedía para el acusado dos años de prisión y una sanción de 3.600 euros. Finalmante y tras alcanzar un acuerdo entre la partes antes de la vista la condena quedó fijada en seis meses de cárcel y 540 euros de multa.