Defensa a ultranza del delegado del Gobierno, Ramón Morey, de la Policía Nacional. «Cuando se está poniendo en cuestión ya no solo la profesionalidad sino la honradez de personas vinculadas a estamentos estrechamente ligados a garantizar el cumplimiento de la ley, no puedo dejar de considerar que es necesario atender más a los autos y las sentencias y menos a comentarios, declaraciones o conclusiones interesadas. Es obligada más responsabilidad, sensatez y moderación y menos crispaciones y prejuicios», sentenció Morey.
«Respeto al principio de presunción de inocencia. Responsabilidad, sensatez y mesura a todos. Porque la Policía Nacional es de todos. Es vuestra, porque con vuestro esfuerzo la construís cada día, pero también es del conjunto de la ciudadanía y por eso entre todos debemos protegerla y no permitir que sea manchada por intereses espurios», remachó.
El alegato de Morey se registra después de que el juez Penalva y el fiscal Subirán, investigados por la Policía por su instrucción del ‘caso Cursach', hayan atacado la profesionalidad y la honestidad del Cuerpo Nacional.
Morey pronunció estas palabras durante la celebración de los Ángeles Custodios, patronos del Cuerpo Nacional de Policía, en un emotivo acto celebrado en el patio de La Misericordia (Palma).
El jefe superior, Gonzalo Espino, destacó con vehemencia la profesionalidad de sus subordinados y el «orgullo» que siente por liderarlos. Aludió además al 40 aniversario de la incorporación de la mujer al cuerpo y al 25 aniversario de la creación de la Comisaría General de Policía Científica, un avance cualitativo en las investigaciones policiales.
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«El número de detenidos es de 5.709, un siete por ciento más que el periodo anterior», señaló Espino. Con una bajada de tasas de criminalidad en delitos contra las personas, drogas o inmigración ilegal, «hemos atacado el tráfico de drogas en Son Banya y desarticulado un grupo de personas que habían quemado más de 400 contenedores y mobiliario urbano causando una gran alarma social», concluyó.
La celebración contó con la presencia de la presidenta Francina Armengol y una amplia representación de las principales autoridades políticas, militares, policiales y de la sociedad balear.
Finalmente, se condecoró a la jueza decana de Manacor Ana Salmerón; al director del centro penitenciario, Francisco José Baldonedo; al oficial de la Policía Local de Palma Antonio Cebrián; al teniente coronel de la Comandancia de Baleares, José Manuel Esponera; al teniente de la Guardia Civil Manuel Martínez Palomo; y a la fiscal jefe de Eivissa María Navarro.