«Nunca te olvidaremos». Este sábado, cuando se cumplen tres años del atropello mortal del policía local Biel Llull en Sineu, por parte de una conductora francesa que iba bebida, sus familiares, amigos, y agentes municipales le rindieron un emotivo homenaje.
Sus compañeros policías organizaron dos rutas en bicicleta, que tuvieron parada en el cementerio de Sineu. Allí estaban los padres del policía, sus hijos, su pareja y su hermana, que agradecieron al medio centenar de amigos el emotivo acto en recuerdo de Biel. Ciclistas del Club de Sineu también se sumaron a la convocatoria. Su compañera leyó un poema y se depositó un ramo para el funcionario fallecido.
Todos coincidieron en recordarlo como una bellísima persona, que no tenía enemigos y que era querido por todos. Un padre ejemplar y un policía modélico. La conductora bebida que lo mató fue condenada a dos años de cárcel, pero ha recurrido la sentencia. Ha vuelto a su país y no tiene ninguna medida cautelar del juzgado. Esta situación, tres años después de los dramáticos acontecimientos, sigue atormentando a sus allegados: «Es una vergüenza».