El recuerdo de Alejandro Ribas, el bombero de Palma fallecido en acto de servicio hace justo nueve años, permanece vivo entre sus compañeros. Este martes, cuando se cumple la triste efeméride del noveno aniversario de su muerte, algunos de los que compartieron vivencias día a día y codo a codo con Álex han querido recordarlo y rendirle un sencillo y sentido homenaje.
De este modo, en su blog, la Agrupació Cultural i Esportiva del Cos de Bombers de Palma ha compartido algunas imágenes cotidianas, divertidas y también de trabajo, de uno de los suyos que tristemente perdió la vida con tan solo 34 años y todo por hacer, cuando fue enviado a hacer su trabajo: sofocar un incendio en un bar de Palma.
Ese fatídico día se fraguó la primera muerte de un bombero de Palma en acto de servicio en el siglo y medio de historia del Cuerpo. Un virulento incendio, que la investigación en primer término determinó que se originó por causas fortuitas, se declaró en un bar de la calle Andreu Feliu de la capital balear.
Las llamas se propagaron desde el fondo del establecimiento y corrieron por todas partes a través del falso techo, que acabó por derrumbarse sobre Álex. Varios tuvieron que ser ingresados y él se llevó la peor parte.
A raíz del triste suceso se inició un proceso lento y farragoso. Hubo condena y los juzgados determinaron que el bombero había fallecido en acto de servicio y con responsabilidad del Ayuntamiento de Palma, una tragedia fruto de la mala organización y las deficiencias que plagaron aquella intervención. Desde entonces el Cuerpo se sometió a un intenso proceso de actualización y mejora. Se revisaron los protocolos y se incrementaron los recursos destinados a sus actuaciones.
Asimismo, el informe final sobre el incendio mortal en Palma determinó un error humano y un cúmulo de factores y circunstancias como causas del incendio, que a la postre acabó con la vida de Álex. Descanse en paz.