Sorín Nicolae Boldea está cansado. En menos de un año le han robado tres veces. Nuestro protagonista regenta desde hace tiempo un conocido taller mecánico en la calle Francesc Pi i Margall, muy cerca del cuartel de la Policía Local de Palma. «Me han entrado dos veces en el taller y los destrozos que me han provocado son mayores que el dinero que se han llevado. La seguridad en Palma es un desastre», apunta Sorín.
Recientemente, el mecánico se encontraba en su domicilio, muy cerca del taller, cuando un ladrón accedió al interior de su vehículo, un turismo Volkswagen Golf de color azul. El turismo se encontraba estacionado frente al número 23 de la citada vía. Los ladrones, sin forzar la puerta consiguieron acceder al interior del habitáculo y hacerse con un suculento botín. Concretamente un equipo de música y altavoces valorados en más de 1.000 euros.
«Lo más extraño es que cuando vino la policía no había nada forzado. La verdad es que unos días antes estuve enseñando el nuevo equipo a varias personas, pero no se puede acusar a nadie. Es una lástima, pero que en menos de un año me roben tres veces no es algo muy agradable», concluye. La investigación sigue su curso y no se descartan detenciones en breve.
Un ladrón le quiere denunciar
«Hace tiempo que dejé de creer en la Justicia. En febrero del año pasado me entraron a robar en el taller mecánico. Forzaron la barrera y cuando estaban dentro conseguí ‘cazar' a uno de los ladrones. El delincuente quiso escapar y lo tuve que reducir. Ahora, resulta que me denuncia él porque dice que le pegué», apunta Sorín.
El mecánico también sostiene que a pesar de haber instalado una alarma de seguridad, los ladrones regresaron de nuevo, le volvieron a forzar la barrera y algo de dinero en efectivo.