Los Mossos d'Esquadra han detenido a un conductor de 30 años que condujo en contra dirección a lo largo de nueve kilómetros por la autovía A-2 a su paso por Caldes de Malavella (Girona).
Según ha informado este lunes la policía catalana en un comunicado, los hechos ocurrieron la mañana de este domingo cuando el conductor circulaba en sentido contrario y, pese a accidentarse contra una barrera, continuó la marcha.
Las patrullas movilizadas le localizaron en el peaje de acceso a la autopista AP-7, en Fornells de la Selva (Girona), y constataron que presentaba signos evidentes de haber consumido alcohol, aunque se negó a someterse a la prueba.