Efectivos de la Policía Local de Málaga han detenido a un hombre, natural de Madrid y vecino de Málaga de 52 años, como presunto autor de un delito de malos tratos en el ámbito familiar, ya que supuestamente fracturó la cadera y el fémur de una pierna a su padre. Asimismo, se resistió a ser detenido por los agentes.
Los hechos tuvieron en la zona este de Málaga capital cuando supuestamente el individuo «agredió brutalmente a su padre», de 84 años, llegando a ocasionarle daños de gravedad, han informado desde la Policía Local.
Nada más tener conocimiento de los hechos a través de la Sala Operativa 092 de la Policía Local, varias unidades acudieron al piso en el que estaban produciéndose los hechos, no siéndoles franqueada la puerta a pesar de llamar a la misma con insistencia identificándose como agentes.
Según han relatado desde la Policía Local, los agentes podían oír voces desde el interior del inmueble de un hombre, que resultó ser el autor de las presuntas agresiones, que les manifestaba frases como «aquí no ha pasado nada, fuera de aquí», así como otras en las que decía «hay que ver lo que he hecho».
Los policías locales lograron contactar telefónicamente a través de la Sala 092 con el padre y víctima de los hechos, quien confirmó que estaba herido y necesitaba ayuda, solicitando que por favor entrasen en el domicilio.
A pesar de que previamente se había solicitado la presencia de efectivos del Real Cuerpo de Bomberos para proceder a la apertura de la puerta, ante la gravedad de los hechos, los policías locales optaron por derribarla con premura, logrando hacerlo a patadas y accediendo al interior de la vivienda.
Una vez dentro, los agentes pudieron oír que la víctima pedía auxilio desde el dormitorio, por lo que algunos efectivos se dirigieron a dicho lugar; mientras que las otras dos unidades detuvieron al hombre, que mostró una fuerte resistencia activa, ejerciendo una fuerza extrema contra los agentes, que finalmente procedieron a su inmovilización.
Asimismo, tras ser solicitada la asistencia, personal médico de una ambulancia del 061 se hizo cargo de la víctima, que fue trasladada a un centro hospitalario con fractura de cadera y fémur de la pierna izquierda, siendo su pronóstico clínico grave y precisando de intervención quirúrgica.
En cuanto a su hijo y presunto agresor fue acompañado a un centro hospitalario para su valoración psiquiátrica, no presentando ninguna descompensación patológica que justificase su ingreso, por lo que fue trasladado a dependencias policiales, para, posteriormente, ser puesto a disposición judicial.