Agentes del Cuerpo Nacional de Policía procedieron a la detención de un peligroso perturbado que se dedicaba a lanzar puñetazos a todas cuantas mujeres se encontraba a su paso en la plaza de España de Palma.
En torno a las 10 de la mañana del pasado martes, el personal de seguridad de la Conselleria de Salut tuvo que salir en auxilio de una joven, de unos 25 años, que estaba tendida en el suelo y que había sido víctima de una agresión por parte de un varón de mediana edad. Los vigilantes, tras una intensa persecución, lograron interceptar al agresor e inmovilizarlo hasta la llegada de los efectivos policiales.
En un primer momento, los viandantes pensaban que se trataba de un tironero y comenzaron a gritar «al ladrón, al ladrón», pero poco después se percataron de que se trataba de un perturbado que iba lanzando puñetazos a todas las mujeres con las que se cruzaba.
Una de las víctimas es una joven pescadera que trabaja en un puesto del Mercat de l'Olivar que, tras recibir un fuerte golpe en las costillas, cayó al suelo. Unos instantes antes, varios testigos confirmaron que habían visto a este hombre lanzar puñetazos al aire y enfrentarse a los transeúntes, especialmente, con mujeres. Los vigilantes condujeron al sospechoso hasta el vestíbulo de la Conselleria y se alertó a la Policía Nacional.
A su llegada, los agentes le arrestaron por un presunto delito de lesiones. El sospechoso es un conocido de la policía, bastante conflictivo y con un amplio historial delictivo. En el arresto, los policías se percataron de que el hombre llevaba una serie de documentación facultativa referente a su estado de salud mental.
Los agentes tomaron testifical a las personas afectadas y se llevaron al acusado. Horas más tarde, el varón fue puesto a disposición judicial y el magistrado de guardia ordenó su puesta en libertad con cargos.