Hasta 23 personas han resultado investigadas o detenidas como consecuencia de la operación que la Guardia Civil ha llevado a cabo contra las falsificaciones en comercios chinos de Mallorca, y que ha permitido intervenir más de 100.000 artículos pirotécnicos que eran almacenados o comercializados sin autorización para ello, o amparados por documentación falsificada.
A los nueve detenidos, responsables todos de los comercios, se les considera presuntos autores de un delito de falsedad documental relativo a la autorización para la distribución de material pirotécnico.
Según la Benemérita habían cometido ilegalidades en la distribución y venta de artículos que infringían la normativa de consumo en su etiquetado, controles de calidad, marcas registradas etc.. Además dispensaban material pirotécnico y armas de aire comprimido sin poseer autorización para ello.
En concreto, durante las inspecciones se levantaron un total de 27 actas por infracciones administrativas a diferentes normativas (consumo, comercio, espectáculos públicos, protección de datos, laboral, facturación e IVA), así como dos informes por observar irregularidades en materia de seguridad industrial.
De este modo se inmovilizaron un total de 5.254 productos por no cumplir con la normativa de consumo, principalmente en el etiquetado, y por ser algunos de ellos peligrosos para los usuarios.