Un joven fue condenado ayer a 55 días de trabajos en beneficio de la comunidad por agredir a su padre en la puerta de la vivienda que ambos compartían en Palma en junio de 2018. Asimismo tendrá que indemnizar a su progenitor en 580 euros por los daños ocasionados y no podrá ni acercarse a menos de 500 metros ni comunicarse con él durante los próximos dos años.
La Fiscalía apreció como atenuante el pago de parte de la responsabilidad civil antes del juicio. El procesado, que está acusado de un delito de lesiones en el ámbito familiar, reconoció los hechos en la vista celebrada este jueves en un juzgado de Palma.
El suceso se remonta a junio del año pasado. Según el relato del ministerio público, el joven intentó impedir la entrada de su padre a la vivienda, echando la llave por dentro. El hombre, al ver que no podía acceder empezó a golpear la puerta. En ese momento el acusado le profirió insultos como «aquí no vas a entrar, gordo de miedo, tú no eres más mi papá».
Al cabo de unos minutos abrió la entrada de la casa y le dio un puñetazo en la cara a su progenitor para posteriormente lanzarle una patada en el pecho, provocándole la caída al suelo, donde siguió pegándole. Como consecuencia de los golpes, el hombre sufrió varias heridas, que tardaron varios días en curar. En un principio el joven se enfrentaba a una pena de un año de prisión. Tras llegar a un acuerdo de conformidad vio rebajada la condena hasta los 55 días de trabajos en beneficio de la comunidad.