El hombre detenido la tarde de miércoles por atracar dos gasolineras en Manacor y Port d'Alcúdia a punta de cuchillo se gastó parte del botín, que alcanzó los 1.000 euros, en comprar cocaína en Son Banya, hasta donde se desplazó después del primer asalto en la capital del Llevant a primera hora de la mañana.
Tras recibir el aviso de su primera fechoría, sobre las 10.00 horas, la Guardia Civil y la Policía Nacional iniciaron la investigación. No tardaron mucho en localizarlo: fue visto en el poblado gitano adquiriendo cocaína.
Tras su visita a Palma decidió volver a actuar, movido por la necesidad de conseguir dinero para más sustancias estupefacientes. Su segundo golpe en apenas unas horas lo decidió hacer cerca de su lugar de residencia: en el Port d'Alcudia. Fue a las 16.00 horas y repitió el modus operandi empleado por la mañana en Manacor. Empuñando un cuchillo para amenazar al empleado de la gasolinera y hacerse con la mayor cantidad de dinero en el menor tiempo posible. Así, se hizo con los billetes grandes de la caja, los de 100 euros y 50. Con ese nuevo botín en las manos, y no contento con lo que consiguió por la mañana, volvió a comprar cocaína, cerca de un prostíbulo de la zona.
Los investigadores ya sabían de quién se trataba el atracador y tenían controlada su casa. Se trataba de un vecino de Alcúdia conocido por su adicción a las drogas y con una larga lista de antecedentes, que además estaba desesperado por el síndrome de abstinencia.
Además de las imágenes de las cámaras de seguridad de ambas gasolineras, donde actuó a cara descubierta, los agentes también desponían de los datos de su vehículo, un Ford Focus de color azul oscuro.
Con toda la información recabada en unas horas, solo faltaba detenerlo. Hecho que se produjo el miércoles por la tarde en el Port d'Alcúdia. En el momento del arresto se disponía a esnifar parte de la cocaína que acababa de comprar. Se le interrumpió y se le comunició que estaba detenido por dos atracos en gasolineras ese mismo día. No opuso resistencia.
Los agentes pudieron recuperar parte del botín, varias dosis de droga y el cuchillo con que amenazó a los empleados de las estaciones de servicio.