Miquel Picó, jefe de Recursos Humanos de la Policía Local de Palma, sufrió este viernes una crisis de ansiedad y fue necesario que unos agentes le acompañaran hasta la Mutua Balear, para ser sometido a un examen médico.
El funcionario, que hace un tiempo ya sufrió problemas de salud en su puesto de trabajo, se encontraba en el cuartel de San Fernando y discutía por teléfono con la regidora Angélica Pastor, que le recriminó la filtración en un web pública de juristas de un informe interno.
Picó empezó a sentirse mal, con dificultades para respirar, y los agentes decidieron trasladarlo rápidamente al centro médico, sin esperar a la llegada de una ambulancia.