Los Mossos d'Esquadra han detenido a un vecino de Rubí de 32 años y nacionalidad española por drogar a mujeres que ejercen la prostitución para abusar sexualmente de ellas, robarles y abandonarlas en algún lugar público.
La investigación se inició en el mes de noviembre del año pasado, cuando los investigadores tuvieron conocimiento de que varias mujeres habían sido víctimas de abusos sexuales. Aparentemente las víctimas no tenían relación entre sí, pero los hechos guardaban numerosas similitudes y por eso se empezó a trabajar con la hipótesis de que el autor era la misma persona, según informa la policía catalana.
El modus operandi era siempre el mismo: el hombre contactaba con mujeres que ejercían la prostitución a través de páginas web. Luego las recogía en un punto previamente acordado para llevarlas a su domicilio.
Disponía de dos pisos, uno en Rubí (Barcelona) y el otro en Cànoves i Samalús, en la misma provincia barcelonesa. De camino a ellos o una vez en la vivienda, les suministraba drogas y ya bajo sus efectos practicaba sexo con ellas sin que las víctimas pudieran recordar nada.
Después de una cuidadosa y exhaustiva investigación, los agentes estrecharon el círculo. A las 6.30 horas del día 19 de enero, los Mossos interceptaron al investigado cuando llegaba al piso de Rubí en compañía de una mujer.
Los agentes comprobaron que ejercía la prostitución y se dieron cuenta de que la mujer estaba bajo los efectos de las drogas, lo que les hizo sospechar que estaban ante otro posible caso, como los denunciados.
En dos entradas y pesquisas, ordenadas por el Juzgado de Instrucción 1 de Granollers a los inmuebles del detenido, los agentes localizaron todo tipo de objetos de carácter sexual, diversas variedades de sustancias estupefacientes, pastillas estimulantes para facilitar la erección, ropa interior femenina, cosméticos, documentación y objetos de las víctimas.
Se da la circunstancia de que en el registro practicado en el domicilio de Rubí, los agentes localizaron una plantación de marihuana con 330 plantas en diferentes estados de crecimiento, propiedad del detenido.
También comprobaron que había manipulado la instalación eléctrica de manera fraudulenta. El detenido pasó el 19 de enero a disposición del juzgado de instrucción en funciones de guardia de Granollers quien decretó su ingreso en prisión, como presunto autor de varios delitos de ámbito sexual, delitos contra la salud pública, delitos de robo con violencia y defraudación de fluido eléctrico.