Stefanie Petra Scharschmidt, la mujer alemana hallada muerta en su chalet de Las Palmeras, era una amante del reiki, una pseudoterapia de origen japonés que practicaba en su chalet de Llucmajor, al que había llegado hacía unos veinte años. Eran frecuentes las visitas de grupos de personas a su casa.
«Venía gente, se juntaba aquí, ponían vídeos y cuando acababan aplaudían todos», relataba uno de sus vecinos. Stefanie mantenía una relación con Udo von Salzen desde hacía año y medio. Ella se separó de su marido, con el que había tenido un hijo, hacía un lustro.
Él era empresario y las cosas le iban realmente bien. Aparentaban que el noviazgo funcionaba, pero la mujer había confesado a su círculo más íntimo que tenía intención de poner punto y final a la relación. «Discutían mucho, pero dos días después parecía que no había pasado nada», explicaba este martes un vecino.
Carta de despedida
Una de las claves de la investigación sobre la pareja muerta en el chalet de Las Palmeras (cabe recordar que la autopsia descarta el estrangulamiento de la mujer) es una carta de despedida que dejó el hombre antes de ahorcarse. En la misiva, que los investigadores han traducido, el empresario no admite el crimen de forma explícita, según informaron en fuentes judiciales, aunque se trata de una despedida.
En la vivienda, que era propiedad de ella, se encontraron otras cartas manuscritas del fallecido, que ahora están siendo analizadas por la Policía Judicial de la Guardia Civil por si pudieran aportar luz sobre lo ocurrido.