Nuevo episodio de violencia en los autobuses del TIB (Transports de les Illes Balears). Una conductora que cubría la línea 104 (Peguera-Magaluf-Palma) fue agredida, presuntamente, por un grupo de jóvenes violentos en Calvià.
Mientras la conductora estaba realizando su servicio de línea pudo escuchar una fuerte música procedente de un altavoz que llevaba un grupo de nueve jóvenes que se encontraban ubicados en la parte trasera del bus. Además, los chicos estaban fumando, vociferando, armando escándalo y provocando molestias al resto de pasajeros.
Desafiantes y violentos
Acto seguido, la conductora detuvo el autobús y se dirigió a la parte trasera para solicitarles que depusieran su actitud e invitarles a que abandonaran el vehículo, ya que en esas condiciones no podían continuar el viaje. En ese momento, los chicos accedieron de manera chulesca y desafiante a abandonar el vehículo profiriendo insultos a la conductora tales como «hija de puta, subnormal, me cago en tu puta madre», según consta en la denuncia interpuesta ante la Guardia Civil.
Una vez fuera del autobús, cuatro de ellos comenzaron a propinar golpes con sus manos a las lunas de la parte trasera derecha y siguieron golpeando el autobús avanzando hasta la parte delantera. Cuando llegaron a la puerta de acceso, rompieron el cristal. Como consecuencia de la fractura de la cristalera y el desprendimiento de una parte del cristal, éste impactó contra la barriga de la conductora, le provocó su caída y se golpeó la cabeza contra el suelo.
La mujer perdió momentáneamente el conocimiento y al recuperarlo pudo observar cómo un grupo de gente se encontraba a su alrededor tratando de auxiliarla. Rápidamente, agentes de la Policía Local de Calvià y de la Guardia Civil acudieron al lugar del suceso para hacerse cargo de la situación.
La víctima presentaba moratones, arañazos en los brazos y manos, en la pierna derecha y zona lumbar. Además de un fuerte traumatismo craneoencefálico. Acto seguido, la mujer fue acompañada a un centro médico mientras los agentes desplazados trataban de localizar a los agresores. La mujer pudo facilitar una completa descripción de los autores.