Agentes del Cuerpo Nacional de Policía procedieron a la detención de dos hombres acusados de obligar a una mujer a robar para ellos en establecimientos comerciales de Palma para luego vender el género.
Los investigadores del caso dan por finalizada la ‘operación Checa', desmantelando un grupo criminal que operaba en Mallorca, deteniendo a dos hombres de 20 y 30 años de edad y a una mujer de 25 años, todos ellos de origen rumano.
Asimismo, el grupo criminal se dedicaba a la explotación de una mujer de origen checo, a la cual, mediante coacciones, insultos, amenazas y agresiones físicas, la obligaban a robar diversos efectos como alimentos, bebidas alcohólicas, gafas de sol y ropa de prestigiosas marcas, en grandes almacenes y pequeños establecimientos para posteriormente venderlos en Rumania. Los arrestados llevaban un elevado nivel de vida por los ingresos obtenidos a raíz de las ganancias que obtenían de la explotación de la víctima y de los hurtos realizados, lo que les permitía no ejercer ninguna actividad laboral durante años en España. Por todo ello se procedió a la detención y posterior puesta a disposición judicial de tres personas por los delitos de trata de seres humanos con fines de explotación laboral, pertenencia a organización criminal y coacciones. Tras prestar declaración, el juez les dejó en libertad con cargos. La investigación se inició a raíz de la denuncia interpuesta por la víctima la cual relató que, estando en Rumania, tres personas de origen rumano residentes en Mallorca le ofrecieron la posibilidad de trabajar en España cuidando a una niña. Una vez aquí la obligaron, además de cuidar a la menor y realizar tareas del hogar en el domicilio, a robar.