A las 02:40 de la madrugada de este domingo, varias llamadas alertaban al 112 de que en las inmediaciones de un conocido local de ocio nocturno ubicado en el polígono de Son Rossinyol, de Palma, se estaba produciendo una auténtica batalla campal en la que participaban medio centenar de personas.
En un primer momento, las informaciones de las personas que llamaban a Emergencias eran contradictorias y confusas, pero todas tenían un mismo denominador común, el número de participantes y que no cesaban de volar sillas y botellas, entre otros objetos.
Con suma celeridad, agentes del Cuerpo Nacional de Policía y de la Policía Local de Palma acudieron hasta el lugar del suceso. Una vez allí, se encontraron con la parte final de una pelea entre dos clanes gitanos enfrentados.
Según el relato de varios testigos, se había producido una violenta reyerta entre los dos conocidas familias de etnia gitana en el interior de una discoteca, que había finalizado con el lanzamiento de objetos y agresiones.
Con grandes dificultades, los trabajadores del establecimiento lograron sacar fuera del local a los implicados en la pelea, que continuaron pegándose en el exterior. Uno de los momentos más peligrosos se produjo cuando uno de los clanes arremetió con un coche a familiares del clan rival, llevándose por delante a varios de ellos y dándose a la fuga.
Acto seguido, familiares y amigos de las víctimas recogieron a los heridos y los trasladaron de urgencia hasta el hospital.
Fuentes oficial de la Policía Local de Palma han confirmado a este periódico el enfrentamiento entre estos clanes y la asistencia policial en la zona, pero también confirman que no se han producido hasta el momento ninguna detención. Al tratarse de un reyerta con lesiones importantes será el Cuerpo Nacional de Policía quien asuma la investigación de lo sucedido.