El conocido como «rey del cachopo», el empresario César Román, antes de ser detenido este viernes, estaba trabajando en un restaurante del zaragozano barrio de Delicias como cocinero, había cambiado su aspecto y había adoptado el nombre de Rafael.
Fuentes conocedoras de la investigación han informado sobre estos detalles, que no han impedido que la dueña del local en el que estaba trabajando, el restaurante «Casa Gerardo», se percatara este viernes mismo de la verdadera identidad de su empleado tras ver un programa de televisión. Entonces llamó a la Policía.
El conocido como «rey del cachopo» estaba en busca y captura desde este pasado jueves tras aparecer el cuerpo de su expareja desmembrado en una maleta, en agosto. Las pruebas de ADN confirmaron que ese cuerpo era efectivamente el de su expareja, de nacionalidad hondureña.
A la espera de determinar desde cuándo estaba trabajando en Zaragoza, las fuentes de la investigación señalan que había cambiado considerablemente su aspecto para internar no levantar sospechas, y así, estaba rapado, se había dejado barba y se encontraba mucho más delgado.
Entró a trabajar en el restaurante con el nombre de Rafael y su puesto era de cocinero.
Fuentes policiales indican que de la operación se ha encargado el Grupo de Homicidios de la Policía Nacional y que el detenido se encuentra en la Jefatura Superior de Policía de Zaragoza a la espera de pasar a disposición judicial.