Un ciudadano holandés ha sido absuelto de la acusación de delito fiscal contra la Hacienda pública por la venta de una casa en Mallorca en el año 2007 por dos millones de euros. El Ministerio Fiscal solicitaba para él una pena de presión de dos años y seis meses y una multa de casi un millón de euros.
El juez ha estimado la queja de la defensa, representada por Jaime Campaner, que manifestó que la inspección de Hacienda utilizó un criterio simple, al limitarse a comparar las escrituras públicas de la propiedad del año 2006, cuando pasó a ser de su propiedad, y del 2007, cuando la vendió a un tercero.
Hacienda apuntaba a que en octubre de 2006, cuando el acusado adquirió la vivienda propiedad de un familiar, ésta tenía un valor de 720.000 euros. Siete meses después, la vendía a un tercero por 2 millones de euros. En su inspección, Hacienda señala una deuda tributaria de 1,3 millones de euros y que al superar la cantidad defraudada los 120.000 euros existía delito fiscal.
La defensa, que solicitaba la libre absolución, exponía que la adquisión del año 2006 no fue verdadera y que, por tanto, no debía tomarse en consideración a efectos penales. Así matiza que fue una donación entre familiares, por lo que no había precio y ni consta el pago por la propiedad. Asimismo señala que se tomó como referencia el valor catastral de la casa, que era inferior al real, y apunta a que la misma vivienda en el año 2003 se adquirió por 1.250.000 euros. Por lo que, a su parecer, no resulta desproporcionado que en 2007 se vendiera por dos millones, cuyo pago está acreditado mediante cheques.
Teniendo en cuenta estas consideraciones, el juez rechaza finalmente el planteamiento formalista de la Inspección realizada por Hacienda, aceptando así el de la defensa y concluyendo la absolución del acusado.