El juez de guardia ha enviado este viernes a prisión al toxicómano de Palmanyola que durante meses asoló ese núcleo y cometió más de 25 robos. La Guardia Civil llevaba tres meses detrás de él y el miércoles lo arrestó durante un espectacular asalto en su casa.
El joven, que tiene antecedentes por delitos similares, llegó a cometer nueve robos en una sola noche de julio en Palmanyola, lo que provocó auténtica alarma social entre los vecinos.
Investigación
La Guardia Civil de Marratxí abrió una investigación y en las semanas siguiente continuaron los robos. El ladrón accedía a los chalets forzando puertas y ventanas con una palanca. Una vez dentro, robaba efectos de valor, dinero y en algunas ocasiones los coches del garaje, si conseguía las llaves. Luego se esfumaba rápidamente porque su viviendas estaba en las inmediaciones.
Esta dato desconcertó a los investigadores, que controlaban los accesos de la carretera de Sóller y nunca daban con él. Hasta que cayeron en la cuenta que podía tratarse de uno de los vecinos. A partir de ese momento, las pesquisas se centraron en Óscar A.V. y esta semana los responsables de la investigación se entrevistaron con el juez del caso y le pidieron autorización para asaltar el domicilio del principal sospechoso. Nueve agentes de un comando especial, armados con pistolas, entraron el miércoles por la mañana y detuvieron al acusado en el comedor.
No tuvo tiempo de reaccionar y no ofreció resistencia. En la vivienda no se encontraron muchos efectos robados, ya que parece que los vendía enseguida a cambio de droga. Sí aparecieron, por ejemplo, llaves de los coches que había sustraído. Y otros efectos que lo implican directamente en la oleada de robos de este verano.