El monitor de un gimnasio de Llucmajor ha denunciado una agresión homófoba en el ámbito laboral ya que, según ha asegurado, ha tenido que dejar su trabajo tras «meses de continua presión y acoso homófobo por parte del propietario del gimnasio».
Según ha informado la asociación LGTBI Ben Amics en un comunicado, el día en que el monitor acudió al centro a firmar su cese voluntario y a recoger la liquidación, se negó a firmar el documento «motivado por dudas legales» y, a continuación, el director del gimnasio le dio un puñetazo.
El agredido ha afirmado que el nuevo propietario del centro deportivo «realiza continuamente comentarios homófobos y machistas dirigidos directamente a los trabajadores» y ha asegurado que era tratado de «maricona» o «diva».
Además, ha explicado que «no se trata del único afectado» ya que, según ha comentado, «otra trabajadora estuvo de baja laboral después de sufrir un ataque de ansiedad provocado por el acoso del director».
Ben Amics ha denunciado «el aumento pronunciado» de los casos que requieren ayuda y asesoramiento de la entidad por «fobia al lugar de trabajo» y ha alertado de «la falta de herramientas para la intervención», además de la «ausencia de campañas de sensibilización, prevención y detección».
Por último, la asociación ha instado a la Inspección de Trabajo y Seguridad Social y a la Conselleria de Trabajo a «impulsar y profundizar su labor frente a estas situaciones de acoso relacionadas con la orientación sexual y la identidad de género».