El juez titular de Instrucción 3, el lunes en funciones de guardia, decretó la puesta en libertad de los cuatro ingleses detenidos por apuñalar a un escocés en el hotel TRH de Magaluf.
La toma de declaración de los sospechosos se alargó. El magistrado decidió dejarlos en libertad pasadas las doce de la noche. Familiares y amigos les esperaban fuera de los juzgados de Vía Alemania desde la tarde.
La riña se produjo la madrugada del pasado sábado. Un grupo de ingleses se cruzó con Robert Watson, su hermano y unos amigos y alguien gritó «¡Viva Escocia!». La proclama enfadó a los anglosajones y la emprendieron a golpes con los escoceses. Watson intentó defender a su hermano, según explicó su abuelo al diario The Sun, y recibió seis puñaladas. Tuvo que ser trasladado de urgencia al hospital Son Espases de Palma.