La Audiencia Provincial ha condenado a seis años de cárcel a un joven que agredió sexualmente a la madre de un amigo en Palma. El acusado, cuando cumpla la pena, deberá participar en un programa de educación sexual. No indemnizará a la víctima ya que la mujer renunció en el juicio. «No quiero dinero, sólo que no vuelva a pasar», dijo.
El tribunal declara probado que el joven, de 24 años, coincidió con la perjudicada en una discoteca y la acompañó hasta su casa en la madrugada del 20 de marzo de 2017. La mujer llamó al interfono de la finca al ver las intenciones del amigo de su hijo. La denunciante accedió al portal y el agresor bloqueó la puerta. La víctima corrió por las escaleras hasta la vivienda, pero el encausado la persiguió. Forcejeó con ella y la arrojó al suelo. Acto seguido le bajó el vestido y le introdujo los dedos en la zona genital. La madre de la mujer oyó los gritos y salió al rellano. El joven se dio a la fuga. La perjudicada sufrió hematomas en la pantorrilla y una erosión en la cara.
«El acusado esgrime como motivo de la denuncia una especie de venganza por haberla rechazado en el rellano, pero esto carece de sentido por ser tan desproporcionado», recoge el tribunal, que no duda de la veracidad del relato de la víctima. El abogado defensor, Toni Oliver, recurrirá la sentencia ya que considera que no se han tenido en cuenta las pruebas objetivas.