Misterio resuelto. Bernhard Kirscht, el alemán de 56 años hallado muerto en un hotel de s'Arenal, sufrió una aparatosa caída por las escaleras. La autopsia practicada este lunes reveló que el hombre falleció a consecuencia de las graves heridas. El turista, con problemas de coagulación, tenía una pequeña fractura en el cráneo.
El pasado viernes por la tarde, cuando una limpiadora del hotel Bahamas encontró su cuerpo sin vida, presentaba más de una docena de golpes. La Policía Judicial de la Guardia Civil reconstruyó las últimas horas de Bernhard Kirscht en Mallorca.
El turista llegó el miércoles a la Isla, solo. Los investigadores barajaban dos hipótesis principales: sufrió una caída o recibió una paliza.
La llave magnética refleja que la última vez que regresó a su habitación fue a las 14.00 horas de jueves. Los investigadores comprobarán las cámaras del establecimiento para tratar de aclarar cómo, cuándo y dónde fue la caída.
Aún faltan por analizar las pruebas toxicológicas para averiguar si había consumido algún tipo de bebida alcohólica o droga antes de sufrir la aparatosa caída.