Los dueños de un club de alterne, ubicado en la calle Manacor, de Palma, se sentarán en el banquillo de los acusados por tener a 18 ‘empleadas' trabajando en negro.
La Audiencia Provincial de Palma juzgará el martes a Lorenzo Jaume C. O. y a Amparo Gemma M. C., como responsables de la explotación del local Pasarella, en el que tenían a un total de 18 trabajadoras sin darles de alta en la Tesorería General de la Seguridad Social.
La Fiscalía pide por estos hechos para los acusados 4 años de prisión para cada uno por un delito contra los derechos de los trabajadores, así como una multa de 3.000 euros por cabeza. El ministerio público destaca en su escrito acusatorio que Lorenzo, además de ser el administrador único de la sociedad, también ejercía funciones de camarero. Por su parte, Amparo era la encargada y regente del prostíbulo.
Las irregularidades se detectaron en una inspección de Trabajo realizada en noviembre de 2015 en el establecimiento, situado en la calle Manacor de Palma. El fiscal señala que de las 21 mujeres que fueron detectadas e inspeccionadas, un total de 18 no estaban dadas de alta en la Seguridad Social. Además, tres de ellas, extranjeras originarias de Brasil, Cuba y República Dominicana, fueron contratadas a sabiendas de que carecían de autorización administrativa para trabajar en España.
También se les procedió a la incoación de un expediente de expulsión al encontrarse de forma irregular en el país. La operación fue dirigida por agentes del Cuerpo Nacional de Policía.