Antoni Gómez, rector de la parroquia de Sant Miquel de Palma, perdonó el pasado lunes al violento indigente que irrumpió durante la celebración de una misa gritando, insultando y realizando gestos obscenos a los fieles que se encontraban en el templo.
La Policía Local de Palma procedió a la detención de Hamade S.B., nacido en Tarragona en 1990 y origen africano, por irrumpir en la iglesia de Sant Miquel de Palma el 1 de junio e interrumpir el culto. El cura que oficiaba la misa, Mossèn Antoni Gómez no le quedó más remedio que ?invitarlo? a que se marchara. Unos minutos más tarde, a la salida de los fieles de la parroquia, Hamade se quedó en la puerta esperando al sacerdote. Una vez allí, le insultó y amenazó:«Lo pagarás muy caro, no voy a parar hasta que me vaya de este país de mierda. Antes de irme tengo que matar a una mujer». Finalmente fue detenido.
El lunes, se celebró un juicio en Vía Alemania donde el indigente, antes de empezar la vista, pidió perdón al cura por sus hechos. El sacerdote, le perdonó y retiró la denuncia. La jueza, entendió la situación y absolvió al acusado. Al final, Hamade se giró al cura y le dijo: «¿Podremos seguir siendo amigos a pesar de todo?». A lo que Mossèn Antoni Gómez, le contestó: «Amigos lo seremos siempre». Una historia con final feliz. Arrepentimiento y propósito de enmienda para el acusado y vocación de perdón para el pastor de la Iglesia.