La Sección Primera de la Audiencia Provincial juzga este viernes a L.G.S., un hombre que intentó apropiarse de distintos bienes -un piso en la Bonanova, un Porsche Cayenne S, unos terrenos en Meco (Madrid) y una embarcación-, que pertenecían a la empresa de la que era administrador solidario junto a otra persona.
La Fiscalía le pide un total de cinco años de cárcel; tres por un delito continuado de administración desleal y dos, por uno de falsedad en documento oficial.
A sus cuatro colaboradores, con quien simulaba supuestos contratos y entre los que se encuentra su suegra, el Ministerio Fiscal les pide penas de dos años y medio de prisión a tres de ellos y una pena de dos años y un mes de prisión a otro.