Agentes de la Guardia Civil se han hecho cargo de la investigación de la muerte de un indigente, en extrañas circunstancias, en Pollença. Hace unos días, Tomeu, que así se llamaba la víctima, recibió una paliza por parte de unos desconocidos. La Policía Local de Pollença lo trasladó a un centro médico, pero éste lo abandonó nada más recibir unas primeras curas.
El pasado domingo, los equipos de emergencia lo localizaron en el interior de un vehículo estacionado en un párking de la localidad con signos de violencia evidentes.
La víctima era un conocido indigente del municipio muy «violento, problemático y alcohólico», según fuentes próximas al caso que investigan lo ocurrido. La causa está pendiente de la autopsia del médico forense.