Libertad provisional, pero con una imputación por homicidio imprudente. Es la situación procesal en la que quedó ayer el camionero detenido tras dar positivo por cocaína y hachís en las pruebas que le realizó la Guardia Civil después de atropellar mortalmente a otro camionero que le estaba señalizando la entrada a un muelle de descarga de un empresa de Santa Eulària.
El imputado fue trasladado a primera hora de la mañana desde los calabozos de Can Sifre a los juzgados de Ibiza, donde llegó en coche patrulla de la Guardia Civil minutos antes de las 09.00 horas.
A media mañana compareció ante el titular del juzgado de Instrucción número 4 de Ibiza, Santiago Pinsach, encargado de la investigación del caso y que poco antes de las 14 horas firmaba el auto de libertad provisional.
Según informaron fuentes del Tribunal Superior de Justicia de las Illes Balears, el juez encargado del caso le imputa inicialmente un presunto delito de homicidio imprudente y a la espera de recabar más pruebas de la investigación no acordó ninguna medida cautelar.
Hasta el edificio judicial de la avenida Isidor Macabich también se trasladaron familiares del conductor fallecido para tramitar el traslado de los restos mortales tras la realización de la autopsia.
Accidente laboral
El accidente mortal ocurrió poco después de las 06.30 horas del jueves en el acceso a uno de los muelles de descarga de una empresa localizada en la calle río Ter, en el término municipal de Santa Eulària, junto a Can Vinyes.
Según el relato de los hechos, Francisco M.C., de 42 años y nacionalidad española, estaba señalizando al conductor de un camión articulado que estaba maniobrando marcha atrás y que le impactó. El operario quedó tendido entre las ruedas traseras del camión y la pared de la nave.
En torno a las 06.45 horas el servicio de Emergencias 061 recibía la alerta y hasta el escenario del accidente se desplazaba urgentemente una ambulancia UVI móvil. El equipo médico desplazado no pudo hacer nada por salvar la vida del trabajador que, según fuentes del 061, presentaba un traumatismo craneoencefálico severo.
Hasta la base de mercancías también llegaban agentes de la Policía Local de Santa Eulària, efectivos de la Policía Judicial de la Guardia Civil y la unidad de Atestados de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil.
Los agentes de la Policía Judicial se encargaron de la investigación y solicitaron la realización de las pruebas de alcohol y drogas al conductor que causó el arrollamiento mortal. El hombre, chófer de una empresa de transporte de mercancías, dio positivo por cocaína y hachís en el drogo-test. La Guardia Civil le detuvo por los delitos de homicidio imprudente y contra la seguridad en el tráfico ya que, aunque el fallecido se encontraba en el interior de un recinto privado, el camión estaba maniobrando en una vía urbana.
Paralelamente, el caso también está siendo investigado por técnicos de la conselleria de Trabajo ya que se trata de un accidente laboral.