La Guardia Civil ha pedido a los vecinos de la localidad turolense de Andorra que no salgan de sus casas y que cierre los establecimientos hosteleros después de que este jueves un hombre que permanece huido haya abatido, supuestamente, a dos guardias civiles y otro hombre en Albalate del Arzobispo (Teruel).
Según han descrito vecinos de la localidad, en las calles de Andorra no se ve «ni un alma» y el ambiente es de «confusión» a la espera de recibir más noticias sobre el suceso.
El dueño de un bar de Andorra ha indicado que la Guardia Civil ha pasado por los establecimientos del municipio indicando a sus propietarios que cierren y se resguarden en sus casas.
El ambiente en esta pequeña localidad turolense situada a 139 kilómetros de la capital de la provincia y que tiene una población menor de 8.000 habitantes es de expectación a la espera de que lleguen más noticias sobre el caso.
El presunto autor del tiroteo, en el que han fallecido dos agentes de la Guardia Civil y un hombre, permanece huido y en paradero desconocido, según han confirmado fuentes de la Delegación del Gobierno.
El supuesto autor ha huido del lugar a bordo de un vehículo pick up, modelo Mitsubishi. La Guardia Civil ha desplegado un importante dispositivo para tratar de localizarle.
En el tiroteo han fallecido los agentes de la guardia civil Víctor Romero Pérez y Víctor Jesús Caballero Espinosa, pertenecientes a los Equipos ROCA de la Guardia Civil, cuyo objetivo es frenar la oleada de robos en las zonas rurales de España. Estaban destinados en la localidad turolense de Alcañiz.
Además, ha fallecido una tercera persona en este tiroteo, un ciudadano que ha sido identificado como José Luis Iranzo, según han confirmado fuentes de la investigación.
El autor de los disparos podría ser la misma persona que tiroteó a dos ciudadanos el pasado 5 de diciembre en una masía de Albalate del Arzobispo (Teruel).
Los hechos tuvieron lugar cuando una persona se dirigía a su casa de campo en Albalate del Arzobispo. El propietario de la casa no pudo acceder a su vivienda y decidió volver a la localidad para solicitar la ayuda de un cerrajero.
Así, ambos regresaron de nuevo al lugar y cuando abrieron la puerta alguien desde el interior les disparó, alcanzando a ambos, al propietario de la casa, un hombre de más de 70 años de edad, y al cerrajero, de unos 40 años.
Estas dos personas se desplazaron por sus propios medios hasta el municipio para dar aviso a la Guardia Civil que, inmediatamente, puso en marcha un dispositivo de búsqueda para localizar al autor o autores de los hechos, que habría llevado a este nuevo tiroteo ocurrido en la tarde de este jueves.