Los dos cadáveres hallados este martes en el pantano de Susqueda, donde se buscaba a los dos jóvenes desaparecidos el pasado 24 de agosto, presentan síntomas claros de violencia, según fuentes de la investigación, pendientes de que las autopsias confirmen la identidad.
Los cuerpos aparecieron desnudos y el que corresponde a un hombre llevaba una mochila a la espalda cargada de piedras, lo que aumentaría los indicios de que se trata de un doble crimen.
Los investigadores trabajan como si se tratase de un homicidio, extremo que deberán confirmar las autopsias, programadas finalmente para este jueves, y que se realizarán no sin dificultad ante el mal estado de los cadáveres, que han estado más de un mes bajo el agua.
El inspector Jordi Domènech, al frente del área de desaparecidos de los Mossos d'Esquadra, ya confirmó este martes sobre el escenario que todo apunta a que los cuerpos corresponden al de Marc H.L., de 23 años y vecino de Arenys de Munt (Barcelona), y Paula M.P., de 21 años y vecina de Cabrils (Barcelona).