La imaginación e improvisación de algunos ladrones al ser descubiertos por la policía no tiene límites. «Señores agentes, estaba robando porque tengo a mi padre muy enfermo ingresado en un albergue y … por miedo a que se quedara sin cama y lo sacaran fuera pensé que lo mejor era entrar en esta vivienda y quedarnos a vivir aquí». Esta es la llamativa excusa que puso un ladrón a los agentes del Cuerpo Nacional de Policía que le ‘cazaron' in fraganti cuando trataba de acceder a un domicilio particular violentando la puerta.
El delincuente no tuvo en cuenta un pequeño detalle. Cuando los funcionarios policiales lo identificaron y comprobaron su filiación por la base de datos policiales descubrieron que el ‘buen samaritano' tenía una larga lista de antecedentes policiales por robo.
Los hechos sucedieron a las 2.30 horas de la madrugada del lunes al martes en la calle Antoni Maria Alcover de Palma. Una mujer escuchó un fuerte ruido en el pasillo y alertó a su marido.
Éste salió al rellano de la escalera y sorprendió al ahora detenido -varón de 30 años- golpeando con un cincel la cerradura de la puerta de su vecino. Acto seguido, el matrimonio alertó a la Policía Nacional. En cuestión de minutos, varias patrullas se personaron en el edificio y procedieron a su arresto.