La localidad madrileña de Mataelpino ha sido el escenario del ‘boloencierro', un encierro en el que se han sustituido los toros por una gran bola de resina sintética de 300 kg. En la presente edición de 2017 ha dejado dos heridos, uno grave tras sufrir un aparatoso golpe en la cabeza.
El primero de los heridos es un vecino de la localidad que tras alcanzarle la bola, tiene tres costillas rotas. Pero el más grave de los heridos es el segundo, que tuvo que ser intervenido de urgencia tras golpearse la cabeza en la carrera, provocándole un coágulo. Actualmente se encuentra ingresado en la UCI del Hospital General de Villalba.
La localidad de 1.700 habitantes puso en marcha este encierro hace siete años, pero ha sido para las fiestas de este curso cuando se aprobó el aumento de su tamaño, pasando de los 100 kilos a los 300, para evitar que la bola se partiera por la mitad tal y como ocurrió en el ejercicio anterior.
Esta decisión ha resultado clave para aumentar el riesgo de la idea, que está siendo muy criticada en las redes sociales.