Vecinos de las calles Eucaliptus, Mimosa y Roser de Peguera denuncian que cada fin de semana se repiten actos vandálicos por parte de jóvenes -entre 20 y 40 habitualmente- que se reúnen en un parque infantil para hacer botellón. «Nosotros solo pedimos que nos dejen descansar, pero cada semana hay jaleo, se reúnen aquí a partir de las doce de la noche y empiezan a beber y a fumar. Después discuten, gritan, ponen la música a todo volumen y no hay manera de poder dormir», afirma una vecina.
La perjudicada indica que «hemos llamado varias veces a la policía por las molestias que causan los jóvenes, pero nunca vienen y nadie hace nada». Los jóvenes «dejan suciedad y causan daños en el parque infantil, hacen pintadas, bailan sobre los coches aparcados, les dan patadas, golpean las barreras de los comercios y una vez hicieron fuego con cartones de cajas», agregó.