El incendio provocado por un okupa el pasado 1 de julio en un bloque de pisos de la céntrica plaza Joan Alzina de Son Gotleu puede ser la chispa que prenda un nuevo estallido social en el barrio. Seis personas resultaron afectadas por el fuego, dos de ellas con heridas leves. El autor de los hechos, un hombre de nacionalidad senegalesa, fue detenido por la Policía Local después de que varios vecinos lo redujeran hasta la llegada de los agentes. Pocos días después, varios intrusos habían sustraído cables del tendido eléctrico y varias tuberías del inmueble afectado.
Tensión
En las últimas dos semanas después de que se provocara el incendio, se han producido una gran cantidad de conflictos en Son Gotleu (ver fotografías arriba). Los vecinos describen el barrio como «un infierno» y temen que se vuelva a producir un estallido de violencia como el del verano de 2014 en el que una batalla campal entre nigerianos y gitanos dejó heridos y obligó a intervenir a más de medio centenar de agentes del Cuerpo Nacional de Policía. El epicentro del cual fue, precisamente, la plaza en la que se produjo el incendio intencionado el pasado 1 de julio.