Un tribunal de la Audiencia ha condenado a un joven con esquizofrenia por abusos a una discapacitada en Manacor. El acusado, marroquí de 23 años, aceptó dos años de prisión por un delito de abuso sexual con acceso carnal. El joven indemnizará a la víctima con 5.000 euros por los daños morales sufridos. No podrá comunicarse ni acercarse a ella en un plazo de 10 años.
El abogado defensor solicitó la suspensión de la pena de prisión y el tribunal no se opuso. El joven estará cinco años bajo custodia familiar y ocho en libertad vigilada. Tendrá que seguir un tratamiento médico acorde con su enfermedad y deberá someterse a un programa de educación sexual.
Los hechos ocurrieron a principios de 2012. El procesado, que tenía entonces 18 años, se encontró con la menor, de 14, en la avenida del Torrent de Manacor. La chica iba acompañada de su hermana pequeña, que tenía cinco años. El joven se dirigió a la víctima y le dijo que le acompañara porque «le iba a echar un polvo». La menor accedió por miedo a que el joven le hiciera daño. El condenado subió a un molino de la calle Comtesa con las dos menores y forzó a la víctima a pesar de su resistencia.