Agentes de la Unidad de Delitos de Odio de la Policía Local de Palma se han hecho cargo de la investigación de unas pintadas satánicas en la fachada de un convento de monjas de clausura de Palma. Hace unos días, la policía fue alertada de que en la pared de la iglesia de Santa Magdalena, ubicada en la calle Jardí Botànic (muy próximo al hospital general) habían pintado una cruz invertida en llamas.
Según los investigadores, el objetivo de las pintadas es tratar de amedrentar a la comunidad cristiana, especialmente a las religiosas que residen en el convento de clausura. Los autores de las mismas se enfrentan a un delito contra las libertades públicas, es decir, contra la libertad religiosa y de conciencia tipificado en el código penal. Todas las sospechas apuntan a que la autoría de las pintadas corresponde a un grupo de extrema izquierda. Nada más tener conocimiento las autoridades competentes, una brigada de Emaya acudió al lugar y borró la pintada.
Una vez finalizadas las diligencias previas por parte de la Unidad de Delitos de Odio de la Policía Local, el expediente será remitido al Cuerpo Nacional de Policía, competentes en la materia, para que concluyan la investigación y procedan al arresto de los autores.