«Mi historia parece una película de terror». Pep Mas Gelabert, un vecino de Costa den Blanes de 77 años, ha denunciado ante la Policía Judicial que fue atacado en su chalet, donde pasó tres días inconsciente, y que tras despertar en Son Espases descubrió que se habían quedado con su casa y su tienda del Paseo Marítimo usando un poder general falso.
La pesadilla de Pep empezó el 30 de diciembre pasado, cuando se fue a dormir como siempre a las once de la noche. Alguien entró en su lujoso chalet de Costa den Blanes y lo agredió brutalmente. El anciano se pasó tres días tendido en el suelo. El día 3 de enero los agresores regresaron: «Debían pensar que estaba en el hospital, pero al verme ahí, sin comer ni beber durante tres días, llamaron a una ambulancia y huyeron», relató. El empresario, que posee una tienda de artículos náuticos en el Paseo Marítimo de Palma, fue evacuado a Son Espases: «Tenía golpes por todo el cuerpo. Un ojo morado y fuertes dolores. El día 4, casualmente, alguien me vio en el hospital, desorientado, y avisaron a mis sobrinos».
Descansar
Un primo médico se llevó a Pep a su casa del Port de Pollença, para que pudiera descansar, y el anciano pasó un mes recuperándose de la paliza. «De repente, me entero que una sociedad creada en el mes de septiembre tiene un poder general mío, falsificado, y que yo he pasado de beneficiario a otorgante. Todo estaba preparado desde septiembre, no fue un robo casual ». La sociedad a la que sin saberlo Pep Mas ha traspasado sus propiedades hipotecó el chalet de Costa den Blanes y la tienda del Paseo Marítimo, y después vendió la casa a un ciuda dano danés: «Mi abogado acudió rápidamente al juzgado y a la policía, pero no llegamos a tiempo de impedir la venta del chalet. Con la tienda tuve más suerte: cuando llegué me encontré con los candados cortados, pero no habían podido entrar porque los vecinos me conocen de toda la vida y se ve que se asustaron».
Notarios
En toda la operación fraudulenta fue necesaria la intervención de uno o varios notarios, para crear la sociedad y apropiarse de las propiedades de Pep Mas, y el anciano sostuvo que «uno de esos notarios ya ha reconocido en el juzgado su responsabilidad. No es normal lo que ha pasado. Si no llega a ser por la desidia del notario no podrían haber llegado tan lejos».