Cuatro personas, entre ellas una mujer embarazada, han sido asesinadas a puñaladas a las afueras de la localidad de Barcelos, en el norte de Portugal, por un vecino que se ha entregado voluntariamente a las autoridades tras cometer el crimen.
Las víctimas han sido identificadas como una pareja de ancianos de 84 y 80 años, una mujer de 58 años que vivía sola y una joven de 37 años embarazada de siete meses, según un portavoz de la Guarda Nacional Republicana (GNR) citado por el periódico luso 'Publico'.
El supuesto autor ha explicado que asesinó a sus víctimas para vengarse por haber testificado contra él en un caso de violencia doméstica. El atacante habría golpeado recientemente con una barra a su hija, también embarazada, y a su exsuegra.
El cuádruple asesinato ha conmocionado a la pequeña localidad, situada en el distrito de Braga. El sospechoso ha sido trasladado a las oficinas de la Policía Judicial en la ciudad de Braga, informa 'Diario de Noticias'.