Los almacenes de la Policía Local de Palma del cuartel de San Fernando están al límite de su capacidad. Por ese motivo, desde la jefatura han dado instrucciones a sus oficiales para que de manera urgente remitan oficios a los juzgados pertinentes solicitando a la autoridad judicial permiso para poder destruir dicho material.
El gran contingente de género incautado y custodiado en dependencias municipales está separado en varios bloques. Por una parte, se encuentra el material judicial retenido por orden de los jueces y que aún está a la espera de juicio. Donde la Policía Local de Palma tiene el gran problema es con los centenares de miles de objetos frutos de las múltiples operaciones y redadas practicadas contra los vendedores ambulantes en la Platja de Palma y en el centro histórico de la ciudad. Sólo en una única intervención realizada en el año 2015 en primera línea de s'Arenal, los agentes se incautaron más de 85.000 relojes de imitación de baja calidad.
Gafas de sol gigantes, gorritos de Papá Noel, cubos de cerveza, monos bailarines, relojes, pulseras, todo tipo de bolsos de imitación, cinturones etc, son sólo alguna muestra del material almacenado en sede policial.
Por otro lado, está previsto que en las instalaciones que la Policía Local tiene en el depósito municipal de Son Toells, el jefe de la Policía Local, Josep Palouzié entregue a los representantes varias ONG varios lotes de bicicletas procedentes de abandonamientos.