La conmoción es generalizada en Francia, tras el hallazgo del cadáver de Yanis, un niño de cinco años de edad, al que su padrastro castigó a correr en calzoncillos y calcetines por la calle y de noche, al haberse orinado en la cama, según la investigación.
Según una información de la web de Le Parisien, el pequeño podría haber sufrido una parada cardiorrespiratoria, aunque también afirma que presentaba una «lesión en la cabeza incompatible con una caída», según una fuente judicial.
El fiscal que se ha hecho cargo de la investigación se centra en la madre y el padrastro del niño, mientras la policía trata de arrojar luz sobre las causas de la muerte. Fuentes del ministerio público, citadas por el medio francés, afirman que la madre declaró que los castigos infligidos regularmente por su pareja a Yanis «eran por su bien» y «para ordenar sus ideas».