Un terremoto de magnitud 6,3 en la escala abierta de Ritcher sacudió este miércoles el centro y el nordeste de la isla japonesa de Honshu, la principal del archipiélago, sin que se emitiera alerta de tsunami o se informara de daños importantes.
Las cercanas centrales nucleares de Fukushima, escenario del peor accidente nuclear en años tras ser golpeada por el terremoto y tsunami que arrasó el nordeste nipón en 2011, no sufrieron problemas de ningún tipo.
El terremoto se sintió también con fuerza en la capital japonesa, donde alcanzó el nivel 3 de la escala nipona, y en las vecinas prefecturas de Chiba y Saitama, donde registraron el nivel 4.
Japón se asienta sobre el llamado anillo de fuego, una de las zonas sísmicas más activas del mundo, y sufre terremotos con relativa frecuencia, por lo que las infraestructuras están diseñadas para aguantar los temblores.