Al menos 29 personas murieron, la mayoría de confesión cristiana, tras consumir alcohol adulterado producido de manera ilegal durante las celebraciones de Navidad en el centro de Pakistán, informó una fuente policial.
La intoxicación se produjo el pasado 25 y 26 de diciembre durante las celebraciones navideñas en una zona cristiana de la ciudad de Toba Tek Singh, indicó el portavoz de Policía de la urbe, Abdul Khaliq.
«Unas 50 personas resultaron afectadas por el alcohol adulterado, de las que han muerto 29», precisó la fuente, que añadió que el resto de las víctimas han sido ingresadas en hospitales de la zona, 17 de ellas en estado grave.
Este tipo de tragedias se producen con relativa frecuencia en Pakistán, oficialmente una república islámica en la que la ley solo permite comprar y consumir alcohol a los no musulmanes, que constituyen poco más del 3% de la población del país.
El pasado marzo un centenar de personas resultaron intoxicadas, de las que 45 murieron tras consumir alcohol adulterado en el sur del país.
El licor puede ser conseguido en el mercado negro a altos precios o en destilerías clandestinas de dudosa fiabilidad.