Una enfermera que realizaba labores de médico en una clínica ha sido condenada a pagar una multa de 540 euros. La acusada, de 39 años, reconoció este jueves los hechos ocurridos entre finales de 2014 y principios del año 2015.
La mujer realizaba tratamientos contra las varices en una clínica situada en el Passeig des Born. Para estos servicios, obtenía polidocanol, un producto específico, gracias a la relación de arrendamiento de servicios con la doctora propietaria de la clínica.
La mujer, sin antecedentes penales, se anunciaba de forma pública en su página de Facebook. A veces, la doctora supervisaba sus labores. En otras ocasiones las llevaba a cabo fuera del centro estético sin conocimiento de la facultativa. Algunos pacientes eran de la clínica y otros no.
La Fiscalía refleja en su escrito que el tratamiento con el polidocanol, según la Sociedad Española de Medicina Estética, constituye un acto médico exclusivo que debe ser realizado por un facultativo o bajo su supervisión.