Kevin Mora, ecuatoriano de 21 años, es un atracador novato. Este verano ha perpetrado dos robos en salones de juego de Palma amenazando a las empleadas. En el segundo asalto se hizo con el móvil de una de las trabajadoras y llamó a su madre. La Policía Nacional le detuvo en posesión del teléfono robado. El joven ha sido condenado a cuatro años de cárcel por los dos atracos.
«Esto es un atraco, tengo una pistola. Dame el dinero o te mato». Son las palabras que el joven le dijo a una empleada de un salón de juegos de Eusebi Estada el pasado 17 de junio. El ladrón simulaba coger un arma de su mochila. Esa pistola no existía. Al menos así ha quedado acreditado para la fiscal, que al principio pedía una condena de ocho años de cárcel.
El joven atracador fue juzgado el pasado viernes por la mañana y confesó los hechos. Tendrá que devolver el dinero sustraído a los locales de juego e indemnizar a una de las víctimas con 200 euros por el valor del móvil sustraído. El condenado ya ha consignado 900 euros.
El juez le impuso también la prohibición de acercarse a menos de 500 metros de los dos salones de juegos y de las empleadas perjudicadas por un tiempo de cinco años.