Una agente de la Policía Local de Palma recibió el pasado 7 de julio una patada al intentar detener a un vendedor ambulante en d'Alt Murada.
El hombre opuso resistencia golpeando a los agentes que trataban de arrestarlo, llegando a arrojarlos por las escaleras.
Finalmente, los policías lograron inmovilizarlo y detenerlo.