La Fiscalía ha pedido 3 y 7 años de condena durante el juicio celebrado este lunes en la Audiencia de Palma a dos hombres acusados de tentativa de homicidio por apuñalar a otros tres en una pelea entre bandas latinas ocurrida en la plaza de las columnas de Palma el 5 de diciembre de 2010.
La sección primera del tribunal provincial ha dejado visto para sentencia el juicio a Diego Alejandro B.M. y Jheyson Alberto A.B., ambos de nacionalidad colombiana, y supuestos miembros de los «latin king», según han explicado varios policías que han declarado como testigos, si bien los dos encausados han negado su pertenencia a dicho grupo.
Los dos han declarado que estaban bebiendo cerveza y fumando con sus parejas en la plaza, cuando un grupo de hombres se acercó a ellos empezó la pelea.
Han alegado que las agresiones fueron en defensa propia y se han culpado mutuamente como autores de los apuñalamientos a tres hombres que la policía cree que pertenecen a la banda de los «master».
«Solo puedo decir que lo que pasó, pasó, que nos defendimos», ha dicho Jheyson Alberto A.B. sobre lo ocurrido. Diego Alejandro B.M. ha coincidido en que la pelea fue «en defensa personal» para protegerse a sí mismo y a su mujer, que estaba embarazada y también se vio mezclada en la reyerta.
«Dije que pelearan como hombres, pero las pegaron con correas y botellas y las arrastraron como si fueran muñequitos», ha detallado el acusado sobre la pelea, y acerca de cómo fueron agredidas su pareja y la del otro encausado.
Si bien los acusados han contado que fueron agredidos por más de una docena de personas armadas, los policías que elaboraron el atestado han coincidido en señalar que el grupo de los acusados lo formaban ellos y sus parejas, que son hermanas, y los otros eran cuatro o cinco.
Los dos cuchillos utilizados durante la pelea fueron hallados en una papelera de la plaza.
Uno de los policías que ha declarado como testigo ha explicado al tribunal que desde el primer momento los dos acusados dijeron que el herido de mayor gravedad los había atacado con un cuchillo pero ninguno de los dos presentaba ninguna herida de arma blanca.
Otro de los agentes que participó en las detenciones tras el suceso ha detallado que ese implicado, un hombre corpulento considerado el jefe de los «máster» en Palma, recibió una decena de puñaladas y que el médico que lo atendió en Son Llàtzer les informó de que «si llega a ser una persona de complexión delgada y atlética y no tan gruesa como él, podían haberle costado la vida».
Para Diego Alejandro B.M., la Fiscalía pide 7 años de prisión por intento de homicidio y para Jheyson Alberto A.B ha rebajado su petición de condena de los 7 años por homicidio en grado de tentativa y 5 años por lesiones que pedía antes del juicio, a 3 años por el primer delito y 6 meses por el segundo que ha solicitado este lunes.
La acusación pública reclama también indemnizaciones por importe de 14.200 euros para los tres hombres que resultaron heridos, por las lesiones y perjuicios causados, si bien uno de ellos no ha comparecido a declarar como testigo porque al parecer se ha marchado a vivir a otro país.