La Audiencia de Palma acogerá el lunes el juicio a Kian Michael O'G., para quien piden 10 años de prisión, acusado de darle una paliza en un local de Santa Ponça a otro hombre que intentó mediar en la discusión que mantenía con una mujer y al que causó graves lesiones como la pérdida de visión de un ojo.
Los hechos que se juzgarán ocurrieron en la madrugada del 27 de agosto del año pasado, cuando la víctima intentó interceder por una mujer con la que estaba discutiendo el acusado, en las inmediaciones de un bar de la localidad situada en el municipio de Calvià.
La Fiscalía cree que el acusado, de nacionalidad irlandesa, dio un fuerte puñetazo en la cara al otro hombre que le hizo caer por las escaleras del local, le levantó del suelo y volvió a derribarlo de otro puñetazo en la cara.
Después le dio varias patadas cuando ya estaba en el suelo, según recoge el escrito de la Fiscalía.
Los golpes le ocasionaron múltiples fracturas faciales y craneales (entre otras de las órbitas de ambos ojos, del tabique nasal y de la mandíbula), que requirieron de tratamiento médico continuado y varias intervenciones quirúrgicas y de las que tardó 71 días en curar.
Como secuelas de la paliza, el hombre ha perdido la visión de un ojo, presenta daños craneales y cicatrices.
La Fiscalía pide para el acusado 10 años de prisión como autor de un delito de lesiones y que indemnice a la víctima con 4.000 euros por las lesiones causadas y con 50.000 euros por las secuelas.
El juicio será el lunes, a partir de las 10.30 horas, ante la sección segunda de la Audiencia de Palma.