Un hombre de 46 años, J.E.O.V., acusado de abusos y agresión sexual a tres menores entre 2009 y 2013, ha admitido este miércoles los hechos en el juicio celebrado en Palma y ha aceptado la petición de pena de la Fiscalía y las acusaciones, de 14 años de prisión y 18 de libertad vigilada.
En el juicio celebrado ante la sección segunda de la Audiencia de Palma, las partes acusadoras han modificado la calificación jurídica de los hechos y han reducido las peticiones de pena al tener en cuenta la atenuante de embriaguez, porque el acusado consumió alcohol cuando cometió los hechos.
La fiscal cree que el hombre, entre 2010 y 2011, aprovechó que se quedaba al cuidado de un menor que entonces tenía 10 u 11 años para abusar de él, masturbarle e intentar penetrarle analmente, unos hechos que se repitieron entre cuatro y ocho veces. También tocó los genitales e intentó forzar a otro menor en esos mismos años, y a un tercero en 2013.
Las acusaciones han pedido que sea condenado por un delito continuado de abuso sexual (por el primer menor) y dos delitos continuados de agresión sexual (a los otros dos menores) y que indemnice a las víctimas en total con 16.000 euros. Inicialmente estaba acusado de cinco delitos de abusos y agresión.
Además se le rebaja la petición de pena en un grado en todos los delitos que cometió, al aplicar la atenuante de embriaguez, por considerar que actuaba bajo la influencia de bebidas alcohólicas que limitaban sus facultades volitivas e intelectivas sin anularlas, ha explicado la fiscal.
Por el delito continuado de abuso sexual, la fiscal y las acusaciones particulares han pedido una condena de 6 años de prisión, 6 de libertad vigilada y 6 de alejamiento y prohibición de comunicarse con el menor afectado; y por los de agresión 4 años de cárcel por cada uno de ellos, además de 6 de libertad bajo vigilancia y otros 6 de alejamiento.
Reclaman además como responsabilidad civil que el acusado indemnice con 6.000 euros a una de las víctimas, y con 5.000 euros a cada uno de los otros dos menores afectados.
Ante el acuerdo de conformidad alcanzado y la renuncia a recurrir, el presidente del tribunal, el magistrado Juan Jiménez ha declarado la causa vista para sentencia, ha señalado que la sentencia conllevará su firmeza y se dictará en los términos descritos en la sala.
Tras el juicio, la madre de uno de los menores ha insultado al acusado y le ha amenazado a gritos.