La Policía Nacional ha detenido a un guardia civil que se atrincheró este lunes de madrugada durante cinco horas en su casa de Aldaia (Valencia) y que disparó a los agentes que trataron de detenerle. Finalmente, las fuerzas del Grupo Operativo Especial de Seguridad (GOES) le han arrestado sin que se produjera ningún herido y ha sido trasladado al Hospital la Fe, según han informado fuentes de la Jefatura Superior de Policía y de la Guardia Civil.
El agente de la Guardia Civil, de 33 años, estaba de baja pero, al parecer, por una enfermedad común por lo que podía mantener su arma reglamentaria, según han confirmado fuentes del Instituto Armado.
Todo comenzó cuando a las 00.00 horas de este lunes se recibió una llamada alertando de problemas domésticos en un domicilio de esta localidad valenciana. Los agentes allí desplazados fueron recibidos a tiros, aunque no hubo heridos, y se retiraron del lugar con la pareja del guardia civil.
En ese momento, procedieron a aplicar el protocolo de actuación para estos casos y se requirió la presencia de los GOES. El guardia civil continuó disparando pero sin alcanzar a nadie.
Asimismo, las fuerzas especiales trataron de entablar una negociación pero no hubo respuesta. Finalmente a las 5.00 horas entraron en el domicilio y sin ningún tipo de fuerza detuvieron al joven que no presentaba ninguna herida física.
El detenido, que estaba muy alterado, fue traslado por una unidad del SAMU al Hospital La Fe de Valencia, donde quedó ingresado bajo arresto, según han informado fuentes del CICU.